El propósito de Marcilla es unir a las personas a través del café, por eso nuestra estrategia de comunicación se basó en una verdad universal: todo el mundo tiene un café pendiente con alguien, ya sea con un amigo del colegio, un compañero de trabajo o un antiguo amor. Con esta premisa, diseñamos la plataforma de comunicación “Cafés pendientes”, además de una campaña integral para presentar el concepto, posicionando a la marca en el centro de los grandes reencuentros.